(De la parte I,
Recuento de versos ajenos)
Antropogonía
Ignoro mis primeros pasos
sin embargo sé
que el mundo abrió su mirada
en la frontera difícil de mi voz.
Pero, ¿entonces de dónde este sabor antiguo
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaen los sonidos
que manchan mi cuerpo?
¿Por qué esta sospecha de que la luz
murmura mis letras iniciales?
* * *
3:18 a.m.
Llueve
porque la ciudad ya no soporta sus recuerdos
y el agua tiene la forma del olvido.
Mañana, por esta misma calle
pasarán al trote las corbatas
aaaaaaaaaaaaaaaborrachas de desamparo
y escucharemos la misa negra
que cantan los relojes;
incluso, si tenemos suerte
se detendrá aquí un puñado de jóvenes
con la mirada oscurecida
por un no sé qué de llanto mal escrito.
Se ha declarado la extinción
aaano de las aves
aaaaaaaaaaaaasino de sus vuelos
se nos acaban los nombres
que hacen de la memoria
una mesa grave a la cual sentarnos.
Mañana, cuando se hayan bebido la tarde
aaaaaaaadesaparecerán.
A todos lo habrá devorado
el gusano sin ojos de la noche.
* * *
El hombre de aquella esquina enciende un cigarrillo
“¿Con cuáles letras crepitantes
escribir fuego
en la franja roja y negra que avanza
calcinando el bosque?”
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaArturo Uslar Pietri.
Digo fuego
con el temblor premonitorio del primer hombre
que vio en las alas de la mariposa
un recado de las llamas.
¿En qué grito harapiento
se esconde la infancia de esta voz?
¿Qué peregrinar de lenguas
la trajo para que me llenara la boca
con la sangre crepuscular de los toros?
Digo fuego
y lo dice alguno de los Heráclitos
aaaaextraviados en la arena
aaaaaaay predica Gautama
aaaque las piedras de los sentidos
aaaaaaaaaaaarden sin consumirse
aaaaaaaaaaaaaay lo escribe el tigre de Blake
aaaaaaaaaaaaaaaaacon sus huellas crepitantes.
Digo fuego
y callo
porque en mí la palabra
se ha incendiado
fiel a su origen.
* * *
(De la parte II, Disolución de los yo apócrifos)
Díptico desesperado
“Tengo la noche en el alma: ¿Dónde
está tu Luz?”
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaOmar Jayyam.
I
Morir no es suficiente.
Tampoco basta el ardor insomne de los vivos
ni esos sonidos delgados, azules
aaaaque llaman días
ni esta cópula sangrienta de palabras.
He renunciado a mi rostro
aaaya ni el espejo me recuerda
he repartido mis granizos crueles
he nublado los pasajes de mi cuerpo
aaaay desandado mis venas
pero todavía no encuentro
la geometría incandescente
de la redención.
II
Sácame del vientre torturado de esta frase
aaaque no se agota
impide que la siga pronunciando
aaacon la lengua seca
aaaaaade tanto castigo
borroso y tanto nunca
señálame mi culpa, la piedra rabiosa
aaadámela a conocer
aaaaaaay úsala para abrirme un rayo
y un grito en las vísceras
arráncame del frío sin recuerdo
expónme a la luz coagulada de esta página:
que el fuego surja
de la fricción entre mis sombras
que florezca un loto certero
en la boca del cadáver.
Magma
(poema para ser leído a gritos)
“El cuerpo es el otro lado del alma.”
aaaaaaaaaaaaaaaaWalt Whitman.
Carne
aaaaquí aaaaaahora
grito llenando de sangre la boca
aaaacon su urgencia
de piedra afilada por la noche
aaaaaaaaaaaaaaCarne
aaaaaaaaaaaaamúsculo rabioso
aaaaaaaaaaaalujo feroz del pensamiento
aaaaaaaahirviendo bajo las palabras
aaaaaaaaaaaaaaaaaaque saben del olvido y
la memoria
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaapero no de la presencia
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaCarne
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaalibre al fin de la geometría
calcinante
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaadel rito y su ceniza
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaacorriendo
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaacomo animal
enloquecido
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaapor un
ángel despiadado
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaCarne del vértigo
aaaaaaaaaaaaaaaaaaafiesta del exceso más
puro
aaaaaaaaaaaaaaaala existencia
aaaaaaaCarne de nunca
magma que abre sus miles de ojos
aaaaaasus imágenes carnívoras
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaquí en el papel
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaen la piel del espíritu
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaasin buscar pecado
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaao redención
Adalber Salas.
(Caracas, 1987). Estudiante del 4º año de Letras en la Universidad
Católica Andrés Bello (UCAB) en Caracas. Incluido en La
imagen, el verbo, antología del Taller de Poesía de
la UCAB (2006). Ha publicado en El Ucabista (periódico
de la UCAB). Desde hace un año es miembro del Taller de Poesía
de Armando Rojas Guardia y hace poco comenzó en el taller de Miguel
Marcotrigiano en la UCAB. Obtuvo el II
Premio Nacional Universitario de Literatura. Mención Poesía
2007. Salvo el poema "Magma", los aquí presentados forman
parte del trabajo ganador.
fotografía: cortesía del autor.
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