domingo 30 de noviembre de 2025

In memoriam. Poemas. Maricruz Patiño

10

Los amantes son siempre desterrados:
el orden no puede ser alterado por los besos,
huyen, la velocidad de sus dedos tampoco es relativa,
cada contacto es irrepetible.
Todo toma el ritmo de las lenguas.
Los cuerpos se acomodan al espacio.
La noche es un reducto así como también el día.
Las hojas de los árboles son siempre las mismas.
Florecen con nosotros y es la primera vez
que el pájaro no canta por costumbre,
nos mira revolcados
como un par de exiliados de la tierra.

45

Y como era mujer
igual que todas
no resistí la tentación
y abrí la caja
descubrí todo el mal del amor
y lo esparcí por el mundo.
La inocencia dio un vuelco
entre las alimañas
sentí la claridad de los temores
las mentiras me recorrieron el cuerpo
sentí hormigas y asco de mi pudor
y me dolió la ingenuidad
esta pasión inútil
tenía las manos llenas de sangre.
¿Cómo volver a respirar ya dulcemente
si todo en sí mismo se destruye?
¿Adónde irás con tanta claridad
Pandora, si hasta en el más profundo
de los sueños, el gusano te roe, te roe?

—
Un cuerpo es más que un cuerpo
un recipiente, un vaso
un cántaro, una piedra
un sueño aparejado con la puerta
cinco minutos más en esta cama.
Un cuerpo es más incluso que su cuerpo
soledad sostenida en la piel
profundo pozo, ausencia interrumpida
campana que anuncia la llegada a tiempo
voz que rompe un silencio con su mirada verde
sobre el monte.
Un cuerpo es más que un cuerpo
es su morada, incluso su pasión.
 
 
 

Árati

Si se durmiera entre tus brazos el silencio
tórrida noche
la luz pudiera persuadirnos
redimir la esperanza

Busqué tu voz oculta en las cañadas
en el desierto
en el mar
para encontrar tan sólo
revoloteos de pájaros
ofrendas de peces

Brilla el gozo
de nuevo el colibrí anuncia tu llegada
resplandeces
canto en varias lenguas tu nombre
habitante glorioso del silencio
 
 
 

Sisal

Mi jardín no tiene nada, solo arena
espejo donde mirar la marea

el alboroto de pájaros ha callado
la riada lleva el aire impetuoso

hay un aliento de luz en cuarto creciente
sutil como la lluvia que cae
gota a gota imperturbable
se acrecienta un suspiro desde la luna.
 
 
 

IV

Verde silencio poblado de pájaros invisibles
cantos desde el silencio
aromas que tejen un manto en el aire
sobre el huerto de bruma
 
 
 

IV

Todo pende de un hilo luminoso
de un vago atardecer de sombras
telaraña de agua
donde a cantar se pone el alma
 
 
 
 
Maricruz Patiño (México, 5 de octubre de 1950 – 1 de julio de 2025). Poeta, ensayista, guionista de cine y televisión. Ha publicado los libros de poesía: La circunstancia pesa (UNAM, 1979). Voces (Hiperión,1984), La prosa de un viaje desesperado (Verdealago, 1990), Otras vidas (Praxis/ Dosfilos,1993), Larga vigilia (Tintanueva Ediciones, 2002) Del mundo y otros cielos (Chihuahua Arde Editoras, 2010), El timón dorado (Sediento Ediciones, 2012), Árati (Porrúa, 2013), La misteriosa voz. Obra reunida 1979-2015 (La cuadrilla de la Langosta, 2015). Sólo los solitarios lo saben (Tinta nueva ediciones, 2016) La hora de los pájaros (Arde Editorial Chihuahua, 2021), Al desandar los pasos (Deslinde, 2022). Es coautora, junto con Leticia Luna y Aurora Marya Saavedra, de la Trilogía poética de las mujeres en Hispanoamérica. Pícaras, místicas y rebeldes (2004) y de la antología Cinco siglos de poesía femenina en México (2011). Su obra ha sido incluida en más de cuarenta antologías nacionales e hispanoamericanas. Estudió Filosofía y Letras en la Universidad Autónoma de México y en la Universidad Iberoamericana. Coordinó la maestría en Apreciación y creación literaria en el Centro de Estudios Casa Lamm (1999-2002). Premio Nacional de Poesía «Efraín Huerta». Tamaulipas, 2009 con el libro Árati. En 2021, fue homenajeada en el Palacio de Bellas Artes por el 70 aniversario de su natalicio.
 
 
 
 
Con autorización de sus herederos
 
 
 
 
fotografía: Nicolás Cabrera Andrade, @nicaan